La vorágine del día a día hace que descuidemos nuestro cuerpo y nuestra mente. Sin embargo, adoptando unos pocos buenos hábitos, tu calidad de vida puede incrementarse notoriamente.

Llevar una vida saludable implica que tomes decisiones en relación con tu rutina diaria.

Tener un cuerpo saludable consiste en abandonar algunos hábitos y adquirir otros que te ayuden a mejorar la calidad de tus días.

Muchas personas creen que adoptar este estilo de vida trae aparejados restricciones, sacrificios y limitaciones. Nada más alejado de la verdad. Aplicando estos simples consejos vas a notar un cambio rápido y positivo.

Sedentarismo, una conducta nociva para tu salud

El sedentarismo es un enemigo muy dañino, ya que no solo perjudica nuestro estado de ánimo, sino que genera daños en nuestra salud corporal.

¿Cómo evitarlo?

En tu rutina diaria, podés evitar el sedentarismo abandonando el ascensor y subiendo y bajando las escaleras cuando llegás a tu casa o al trabajo. Otro consejo es desplazarte a pie a distintos lugares, en lugar de usar el automóvil. O adoptar el hábito de la bicicleta.

Ejercicio Físico, el mejor aliado

Dedicándole solo 30 minutos diarios al ejercicio físico, vas a experimentar cambios sorprendentes. No solo mejorará tu actividad cardiovascular y fortalecerá tus músculos, sino que también tendrá un impacto positivo en tu estado anímico.

La buena alimentación, un paso clave

Tener un plan alimentario abundante y variado es una de las cosas más importantes para alcanzar una vida saludable.

Algunos tips para ordenarte con tu plan alimentario:

  • Respetá las cuatro comidas diarias (desayuno, almuerzo, merienda y cena), intentando abarcar proteínas, lácteos, minerales y vitaminas en tu dieta.
  • Consumí a diario cinco diferentes tipos de frutas y verduras.
  • Recordá lavar tus alimentos con agua segura.
  • Comé con tranquilidad, tomate tu tiempo para lograr una buena digestión.
  • Reducí la cantidad de sal que agregás a tus comidas y evitá aquellas con alto contenido de sodio, ya que de esta manera prevenís enfermedades cardiovasculares y de hipertensión arterial.
  • Bebé mucha agua, al menos 2 litros diarios.

Tabaquismo, un mal mayor

No fumes, no te lo permitas. El cigarrillo es un gran enemigo de tu salud, ya que acarrea enfermedades pulmonares, cancerígenas, entre otras.

La ansiedad y el estrés, los anti-aliados de tu salud

Si llevás una vida vertiginosa, poné un freno. Este estilo de vida acarrea estrés, claro enemigo de nuestra salud mental y física.

Intentá lograr un sueño reparador para bajar los niveles de ansiedad. Un sueño ineficiente es causa de sobrepeso y malestar general.

Chequeo médico, la mejor manera de prevenir

Realizá chequeos de rutina, para asegurarte de que gozás de una buena salud física. Recordá que siempre es mejor prevenir que curar…

Estos consejos sobre un estilo de vida saludable pueden ser el comienzo de un cambio positivo en tu rutina diaria. ¡Aprovechalos!