La limpieza de muebles de madera es sencilla, aunque requiere cuidado y conocer ciertos trucos.

Seguramente, en tu casa hay muebles de madera. Tal  vez alguno heredado de tus abuelos o padres. Y es el que da calidez a tu hogar, porque no hay material más noble y bello que la madera.

Sin embargo, su superficie puede rayarse con facilidad o acumular polvo enseguida.

Para que luzcan siempre brillantes y espléndidos, te pasamos algunos tips.

¿Qué cosas pueden dañar la madera?

La humedad

Este es un factor que puede dañar seriamente tu mueble de madera, ya que este es un material natural que absorbe el agua con facilidad.

Lo aconsejable es evitar derrame de líquidos sobre la mesa o de un vaso de agua en tu mesita de luz.

Insectos

La Carcoma y las Termitas son insectos a los que les fascina la madera. Por eso es aconsejable revisar periódicamente tus muebles para verificar que no han aparecido en ellos.

Si esto ocurre, lo ideal es actuar lo antes posible contra ellos.

Exposición a la luz natural

Los rayos solares son perjudiciales para la madera, por lo que es importante que evites su exposición directo e, incluso, indirecta.

El sol hace que los mueves pierdan su color natural y vayan adquiriendo una tonalidad grisácea.

Limpiar de la manera correcta

 Cuando limpiamos muebles de madera cometemos, sin saberlo, algunos errores.

Plumero

El plumero no ayuda en la limpieza, sino que da más trabajo.

Mismos trapos

No es recomendable usar la misma gamuza varias veces, porque se humedece y no favorece a la superficie de los muebles.

Además, es recomendable que cada vez que vayas a limpiar el polvo sobre tus muebles limpies todas las franelas y cada tres meses las deseches y las cambies por una nueva. Tus muebles te lo agradecerán.

Pulverización directa

Nunca pulverices directamente sobre el mueble, a menos que lo indique el producto.

Tenés que humedecer el paño para no dañar la superficie del mueble.

 Limpiar de arriba a abajo

¿Vos por dónde empezás? La limpieza del polvo debe empezar por el suelo porque en cuanto agarrás la escoba las partículas del polvo se van a desplazar hacia arriba.

Utilizá las herramientas adecuadas

 Dos gamuzas

 Agua templada

 Jabón neutro (si tu mueble está lacado también puedes usar detergente suave).

Un paño seco

¿Cómo limpiar correctamente?

Humedecé la gamuza en agua templada o haz una disolución de jabón neutro  en agua tibia y humedecé el trapo en la disolución.

Hacé pasadas sobre el mueble de madera y siempre en el sentido de las vetas, no presiones demasiado para evitar rayones.

Aclará posteriormente con otra gamuza humedecida solo en agua.

Terminá con un paño seco para eliminar los restos de humedad.

Probá estos consejos y despúes nos contás.